Vivienda bifamiliar
Categoría ARQUITECTURA RESIDENCIAL Provincia SALTA Ubicación SALTA CAPITALDescripción
El proyecto surge a partir de la necesidad de dos hermanos que, compartiendo un mismo terreno, buscaban desarrollar sus viviendas independientes, manteniendo la funcionalidad y privacidad de cada una, pero sin perder el sentido de unión familiar. De esta premisa nace una propuesta arquitectónica que combina independencia y conexión, donde las dos unidades dialogan a través de una composición equilibrada y coherente.
La volumetría se organiza mediante dos cuerpos principales que se enfrentan y se abren hacia el espacio central común, conformado por el área de piscina, expansión y solárium. Este vacío intermedio actúa como punto de encuentro, generando una relación fluida entre interior y exterior, mientras que el diseño de las fachadas asegura la privacidad de cada vivienda.
El lenguaje arquitectónico se basa en líneas puras y volúmenes contundentes, destacando la horizontalidad como elemento rector de la composición. Los planos de hormigón visto y las superficies revestidas en madera natural aportan un equilibrio entre lo contemporáneo y lo cálido, reforzando la sensación de solidez y serenidad. La combinación de texturas y materiales nobles genera contrastes armónicos, donde la madera suaviza la contundencia del hormigón, y los cerramientos vidriados otorgan ligereza y transparencia.
Cuenta con unas carpinterías en tonos dorados que fueron seleccionadas como un detalle distintivo dentro de la paleta neutra del proyecto, aportando un toque de sofisticación y calidez. Este tono metálico, sutil pero elegante, complementa los acabados naturales y refleja la luz, generando una identidad única en el conjunto.
En planta baja se desarrollan las áreas sociales, concebidas como espacios amplios, flexibles y conectados visualmente con el exterior. La continuidad del pavimento y las amplias aberturas favorecen la integración con las expansiones al aire libre, extendiendo las actividades familiares hacia la galería, el jardín y la piscina. En planta alta, en cambio, se ubican las zonas privadas, organizadas para garantizar independencia y confort, con visuales estratégicas hacia el entorno natural.
El tratamiento del entorno fue pensado como una extensión del proyecto arquitectónico: la vegetación de escala baja y media enmarca los volúmenes y refuerza la privacidad sin interrumpir las visuales. El diseño del solárium y la piscina acompaña las líneas del conjunto, destacando la geometría limpia y la continuidad material del proyecto.
En síntesis, esta vivienda bifamiliar logra resolver de manera equilibrada la convivencia entre dos hogares dentro de un mismo lote, a través de una arquitectura sobria, contemporánea y funcional, donde los materiales, la proporción y la luz dialogan constantemente. La propuesta se define por su armonía entre lo masivo y lo liviano, lo natural y lo artificial, consolidando un espacio que refleja la unión familiar sin renunciar a la individualidad de cada vivienda.